Me muero por algo dulce

La ingesta de alimentos ricos en hidratos de carbono (cereales refinados, pan, pasta, arroz, dulces, et..) produce una gran cantidad de insulina por parte del páncreas, lo que hace que esta gran cantidad de azúcar que pasa, bruscamente, del intestino a la sangre(generando una hiperglucemia) se introduzca, rápidamente, en el interior de las células, dando lugar a una disminución transitoria de los niveles de azúcar en sangre (hipoglucemia). Este fenómeno, que llega a su máximo nivel a las pocas horas de haber terminado la comida, desencadena una respuesta cerebral de “hambre y deseo de comer alimentos ricos en hidratos de carbono(o dulce), con el fin de volver a conseguir niveles óptimos de azúcar en sangre, con la consecuencia final de desarrollar un círculo vicioso de cuantos más hidratos de carbono consumamos en cada comida, mayor será nuestro deseo de consumir más, a las pocas horas de haber comido.

Al aplicar una dieta baja en hidratos de carbono, al no segregar can cantidad de insulina después de cada comida, no se sufrirán estos aumentos y descensos bruscos en el nivel de azúcar en sangre y tu cerebro no te obligará a consumir más azúcar para estabilizar los niveles sanguíneos, sino que se sentirá “saciado” durante más tiempo.

A parte de realizar una dieta baja en hidratos, una manera de controlar o calmar los deseos de dulce sería tomando alimentos que “engañen” a nuestro cerebro, que aporten el sabor dulce que buscamos pero sin los efectos negativos que nos aportaría consumir esos alimentos dulces, por ejemplo se puede tomar coca cola ligth , nestea sin azúcar, fanta zero…, o también se puede comer algún chicle o caramelo sin azúcar. Además en nuesto blog colgamos varias recetas bajas en hidratos que se pueden comer sin ningún problema y cumplen la función de quitarnos esos “ antojos”.